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Kanikosen (El pesquero)


Takiji Kobayashi fue arrestado por la policía japonesa y cinco horas después aparecía en la morgue de un hospital, víctima de una paliza. Muerto, naturalmente. Eso fue en 1933, cuando Japón comenzaba una etapa de expansión imperial y belicista y no toleraba la disidencia. ¡Mucho menos iba a tolerar comunistas japoneses!

Y eso era Takiji Kobayashi, un comunista de la vieja escuela, un antiguo empleado de banca convertido en sindicalista obrero y lo que es peor, en escritor. Ya saben: las tiranías se llevan mal con los libros. Le duró poco el oficio a Takiji Kobayashi, porque la policía fue tras él y lo mató. Apenas tenía treinta años. Así murió el autor de Kanikosen (El pesquero), que hoy edita El Ático de los Libros, traducido por Jordi Juste y Shizuko Ono. Otro acierto de esta nueva editorial, felicidades.

Kanikosen es un relato duro. Narra las condiciones de trabajo en un buque-factoría que se dedica a la pesca y conserva del cangrejo en la frías aguas que bañan Kamchatka, hacia 1925. Miseria, crueldad, penurias e injusticias, las que se viven en el Hakko Maru, hasta que... En fin, no diré más.

La novela se publicó en 1929, con el único propósito de denunciar el abuso del capitalismo sobre la clase obrera. Es una obra típica del realismo socialista. Por poner un ejemplo, los personajes son anónimos, porque es la masa obrera la que cuenta en estos casos. En los años sesenta, inspiró una película; ahora, otra. Parece ser, se lee por ahí, que Kanikosen se ha convertido en un fenómeno en el Japón. Dicho esto, es también un buen libro, muy bien escrito y absolutamente recomendable. Que quede constancia.

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