La Sra. Cospedal, portavoz del PP y candidata a la presidencia de la Comunidad Autónoma de Castilla y León, se presenta ayer delante de la prensa y deja ir como quien no quiere la cosa que el PSOE ha contratado a algunos detectives para espiar a algunos de sus compañeros del PP. Compañeros, añade, muy significativos. Toma, ahí queda eso. No hay ni que decir que en el PSOE se han puesto como una moto. Su oponente en las elecciones autonómicas se ha apresurado a responderle y darle caña a la candidata popular. En esa respuesta vive el palabro de hoy.
Dice el airado personaje, delante del micrófono: No puede ser que después de una acusación tan grave salga gratuita.
¿Quiere decir que la señora Cospedal podría salir gratuita? Según la RAE, algo es gratuito si sale de balde o de gracia, pero ¿una persona puede salir gratuita? Gratuito es también arbitrario, sin fundamento. Conozco personas que no tienen fundamento; yo mismo, sin ir más lejos. Podríamos discutir si la señora Cospedal tiene fundamento o no lo tiene. Pero el caso es que no conozco personas gratuitas.
Quizá no fuera gratuita la señora Cospedal, sino la acusación tan grave. En efecto, una acusación puede ser gratuita, por carecer de fundamento y es evidente que el personaje piensa o quiere dar a entender que tal acusación es gratuita. Pero lo que de verdad quiere decirnos es que semejante acusación no puede salirle gratis a la señora Cospedal. También podría haber sostenido que tal infamia no podía quedar impune. Podría haberla llamado mentirosa, ya puestos. Fea. Qué sé yo.
En fin, hay muchas maneras de decirlo, pero se diga como se diga y pase lo que pase, la señora Cospedal no saldrá gratuita de ésta.
Dice el airado personaje, delante del micrófono: No puede ser que después de una acusación tan grave salga gratuita.
¿Quiere decir que la señora Cospedal podría salir gratuita? Según la RAE, algo es gratuito si sale de balde o de gracia, pero ¿una persona puede salir gratuita? Gratuito es también arbitrario, sin fundamento. Conozco personas que no tienen fundamento; yo mismo, sin ir más lejos. Podríamos discutir si la señora Cospedal tiene fundamento o no lo tiene. Pero el caso es que no conozco personas gratuitas.
Quizá no fuera gratuita la señora Cospedal, sino la acusación tan grave. En efecto, una acusación puede ser gratuita, por carecer de fundamento y es evidente que el personaje piensa o quiere dar a entender que tal acusación es gratuita. Pero lo que de verdad quiere decirnos es que semejante acusación no puede salirle gratis a la señora Cospedal. También podría haber sostenido que tal infamia no podía quedar impune. Podría haberla llamado mentirosa, ya puestos. Fea. Qué sé yo.
En fin, hay muchas maneras de decirlo, pero se diga como se diga y pase lo que pase, la señora Cospedal no saldrá gratuita de ésta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario