Mejor musculorzas que fofisano

Dicen los mentideros que el musculitos se está pasando de moda. El modelo tableta de chocolate está cediendo puestos ante el embate de las barriguitas que lucen las personas normales y corrientes. 

A la derecha, guapo; a la izquierda, feo.

Los biólogos y los psiquiatras ya llevan mucho tiempo diciendo que el varón más sexualmente atractivo tiene un ligero sobrepeso, que se cifra en los alrededores de un 15%. Si usted es aficionado a los documentales de animales, sabrá que el macho alfa de los grupos de simios es un barrigón, lo que da alas a esta teoría. También podríamos hablar largo y tendido sobre por qué los varones prefieren las curvas a las autopistas, pero ésa es otra discusión.

La cuestión es que los que dictan qué está de moda y qué no han escogido un nuevo modelo de varón sexualmente atractivo, que luce sin empacho una modesta barriguita. La moda nace en los EE.UU., donde no se han ahorrado la polémica. Al parecer, el nombre con el que se designa a un varón con barriguita que está como un tren, para comérselo y demás, es Dad Bod (bod, de body), que traducido muy liberalmente quiere decir cuerpazo de papá.

Enrique VIII, Harry para los amigos, tenía cuerpazo de papá.

¿Cómo traducir dad bod al español? Algún genio se ha inventado el término fofisano. La voz ha corrido como la pólvora, pero la palabra no convence. Han surgido movimientos que piden a gritos otro término para designar al varón sexualmente atractivo con barriguita.

Napoleón, otro cuerpazo de papá.

Consciente de esta polémica, El cuaderno de Luis ha preguntado a sus lectores qué término prefieren para designar al guapetón con michelines. Se han propuesto fofisano, bajo de tórax, guapanzudo, morcicincelado, fofollable y musculorzas, pero hay más, como gordiflaco, lorzalamero, panzardiente y los que vengan después.

De tórax bajo, guapanzudo y fofisano no han encontrado ningún apoyo entre los lectores de El cuaderno de Luis. Consideran que el primero es un eufemismo innecesario. Fofisano, ya lo hemos dicho, no gusta. Guapanzudo, tampoco, y no sabemos por qué.

Morcicincelado ha llamado la atención de uno de cada seis lectores, poco más o menos. La asociación de morcilla y cincelar en una sola palabra da alas a la imaginación y tiene más éxito que las anteriores. Pero ¿a qué morcilla se refieren los encuestados? Mejor no sigamos por ahí.

Fofollable también parece una buena opción, y cuenta con el apoyo de una tercera parte de los votantes. Ahora bien, si uno quiere lucir una maravillosa y discreta barriguita en el yate de papá, en el cóctel del verano, rodeado de gentes finas y cultivadas, fofollable no será la palabra más adecuada. 

La mitad de los lectores de El cuaderno de Luis se han inclinado por musculorzas, palabra que define un tipo que tendrá barriga, sí, pero también la fuerza necesaria para imponerse sobre los demás machos del lugar. En cualquier grupo de simios, un musculorzas sería un macho alfa. ¿Por qué no entre los humanos?

Musculorzas, además de peludo. Muy mono.