Se veía venir. Ayer recibí varios mensajes que me avisaban de un suceso que en cualquier otra parte provocaría un escándalo. Me adjuntaban un enlace con el DOGC (Diario Oficial de la Generalidad de Cataluña), éste:
La señora Masià, la directora interina de la OAC (Oficina Antifraude de Cataluña), ratifica en su cargo a tres técnicos eventuales después de haber organizado una purga en la que se sacó de encima a cuatro directivos sin razón justificada alguna. En comisión parlamentaria dijo que se los había sacado de encima porque eran empleados eventuales y personas de confianza del señor De Alfonso. ¡Toma! ¡Como ella misma!
Fíjense en el documento que he adjuntado. La señora Masià ratifica en su cargo a Susanna (Susana en el DOGC) Cano, que fuera ¡candidata por CDC a las últimas elecciones al Parlamento Europeo! Sí, muy atrás en la lista, pero muy orgullosa de fotografiarse en público al lado de los señores Mas y Pujol padre y presumir de ello en las redes sociales. En su día, su nombramiento por De Alfonso causó algo de ruido, porque fue poco después de haber colocado como directora adjunta a la señora Masià. Entonces, De Alfonso era un héroe de CDC, porque estaba invadiendo la OAC con gentes afines al partido. El señor Mas y todo CDC corrieron a defenderlo. Qué tiempos aquéllos.
Un recuerdo del caso en este recorte de El Mundo, donde también se repasa el currículum de la señora Masià.
Ha ratificado, decía, a la señora Cano, tan escogida por De Alfonso y tan eventual como ella misma, tan amiga de los amigos de CDC como ella misma, tan comprometida con la causa convergente como ella misma. Pero ha echado a la calle a cuatro cargos de la OAC que no eran tan amigos de ella misma.
Se dijo, en la misma sede parlamentaria, que los despidos habían sido discrecionales e injustificados y que la directora interina estiraba más el brazo que la manga. ¿Puede un cargo interino tomar tales decisiones? Legalmente, es posible, porque no se contemplaba esa posibilidad cuando se redactó el reglamento de la OAC. En principio, un director interino ha de gobernar el día a día esperando a que llegue el nuevo director, y será el nuevo el que organice los cargos a su antojo y según su criterio. Pero... Ella es así.
Dejando a un lado el vacío legal, esos despidos fueron considerados éticamente cuestionables por los señores parlamentarios. ¿Por qué echa a la calle a quien propuso auditar la OAC para ver quién podría estar implicado en las grabaciones de las conversaciones entre De Alfonso y el ministro Fernández? ¿Tanto miedo tiene(n) a una auditoría interna? ¿Por qué ratifica, en cambio, a una antigua candidata electoral de CDC? Etcétera.
Dicen los periódicos (y mis informantes) que el clima en la oficina es ahora asfixiante, y eso que el aire acondicionado funciona. Sucedió algo parecido cuando la señora Masià pasó por el ICAEN (Instituto Catalán de Energía) y eliminó uno de cada tres empleos en un par de años mientras daba tratos de favor (ejem) a amigos y conocidos.
La noticia ha sido publicada hoy en el periódico eldiario.es. Aquí:
Más en:
Es una inútil del partido como la que la ha ratificado.
ResponderEliminar