Después de nueve meses de practicar con el sable, me decidí a probar suerte en una competición interna del club. Participé en una poule y luego pasé a competir en mi categoría. La poule (todos contra todos) salió mejor de lo que me esperaba y quedé segundo de mi grupo. En mi categoría también quedé segundo, pero antes de aplaudir quizá sea lo propio añadir que en mi categoría éramos dos. Fue muy divertido y me regalaron una medalla por participar y no llevarme a nadie por delante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario