Mujeres, hombres y vergüenza ajena


Mujeres, hombres y viceversa (MYHYV, en acrónimo y #MYHYV como hastag de Twitter) es (cito, y perdón por la redundancia) un programa de citas producido por Bulldog Producciones y emitido en Telecinco desde el 9 de junio de 2008. Es una copia adaptada de un programa italiano llamado Uomini e donne y es uno de los buques-insignia de la televisión cutre, hortera y estúpida que tanta afición despierta entre el público y que tanto nos hace sospechar de la decadencia de Occidente.

Debate sobre la Crítica de la Razón Práctica y su refutación metafísica.

Dicen que va de varones y mujeres que no tienen pareja y que han de enfrentarse a varios candidatos de uno u otro sexo que intentarán seducirlos en una serie de citas, cada cual más... más... no sé qué adjetivo emplear... más eso que la anterior. Luego habrá debate en el estudio, que no es tal debate, sino un grupo de gente a la que no quisieras ver jamás cerca de tus hijos echándose insultos a la cabeza los unos a los otros, a voz de grito y sin escrúpulos, y gozándose de ellos mismos y su efímera fama. El vocabulario empleado por los concursantes es tan soez y tan gramáticamente horrendo que ha provocado quejas y protestas sin número, porque el programa se emite (atención) en horario infantil. Telebasura cien por cien, de la mala, de la que tiene tanto éxito. 

Los atentados de Bruselas, que dejaron más de treinta muertos y docenas de heridos, obligaron a Telecinco a suprimir el programa. Un especial informativo sobre el suceso y la gravedad del mismo eran excusas más que suficientes para suprimir el bodrio de Mujeres, hombres y viceversa.

Pero el público... Ah, el público... Después de un comunicado del programa en Twitter donde anunciaba que no iba a emitirse y enviaba su condolencia a las víctimas, se desató una tormenta en Twitter. Cientos de protestas contra la supresión del programa asaltaron la red con el hastag #MYHYV y fue trending topic. En cristiano y que se entienda, los mensajes que pedían que no se suprimiera el programa y que se emitiera igualmente superaron en número a cualquier otro mensaje de condolencia o de apoyo a los belgas. Tal cual.

Como cantaba Cecilia, Mi querida España, esta España mía, esta España nuestra, y así nos va.

1 comentario:

  1. No es la primera vez. La anterior, creo recordar, fue con motivo del reciente y fallido debate de investidura. Los airados espectadores de esa bazofia preferían ver a los musculados que saber si en España íbamos a tener presidente o no

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