Burro y rico, dos veces burro



La ignorancia no degrada al hombre más que cuando va acompañada de la riqueza. En el miserioso, agobiado por su pobreza, el trabajo reemplaza al saber y ocupa todos los pensamientos de su vida. Por el contrario, los ricos que son ignorantes viven únicamente para sus placeres y se asemejan a las bestias, de lo cual vemos ejemplos todos los días. Además, hay que reprocharles que no empleen su riqueza y su bienestar en lo que da a éstos mayor valor.

Parerga und Paralipomena, Tomo II, pág. 586
Arthur Schopenhauer
Traducido por Edmundo González-Blanco

No hay comentarios:

Publicar un comentario