Adivina, adivinanza: ¿De qué va la Universidad Catalana de Verano?
Pistas: 2014 es el Año Internacional de la Cristalografía, según Naciones Unidas.
Seguro que no lo sabían, pero es mucho más interesante.
CiU organiza cada año lo que pomposamente llaman una Universidad Catalana de Verano (sic) en la Prada de Conflent, que está en el quinto pino, un poco más allá. Ejercen de profesores de tan egregio acto los mismos que mandan, que así se gozan de lo mucho que (dicen que, creen que, presumen que) saben ante un público entregado. Así ya pueden hacerse a la idea de lo que puede aprender uno ejerciendo de alumno. Mejor si uno leyera un libro por su cuenta, la verdad.
Me llama la atención una cosa, que se ha dicho y se sigue diciendo. En estas clases de adoctrinamiento político no faltaba nunca el señor Pujol, antes muy honorable de título, que no como persona, como él mismo ha confesado. Este año, debido a razones familiares y personales, ha declinado su asistencia.
El autor del Gran Engaño todavía se rifa de nosotros.
Pero ha declinado su asistencia, qué detalle.
¡C...! ¿Quiere decir que si no hubiera declinado su asistencia estaría allá postulando ética política y moral cristiana, el muy chorizo? ¡Nada de declinar su asistencia! A ése se le dice que no se admiten canallas y se le echa. Punto. Así anda el patio, fíjense. ¡Ha declinado su asistencia...! Uf.
Es que él y su familia estaban muy ocupados denunciando a los bancos andorranos por violar el secreto bancario, literalmente. Hay prioridades en la política catalana y una es el afán de lucro, seguramente.
A lo que iba. Uno de los ponentes, este año, ha sido don Baudilio Ruiz, consejero de Salud y uno de los principales responsables del desmantelamiento, privatización y destrucción de la sanidad pública catalana. Este verano ha aprovechado para recortar 3.000 camas hospitalarias (sic) y ¡se han colapsado las urgencias! Pues ¿qué creían que iba a pasar, si no?
Don Baudilio, uno de los personajes más cínicos (en el peor sentido del término) que se recuerda en la política catalana, pontificando en la Universidad Catalana de Verano y echando las culpas a los enfermos.
El gran cínico, don Baudilio, ha diagnosticado el origen del mal: Cuando entran más [enfermos] de los calculados, es entonces cuando se produce el colapso. [...] Pero si vienen más enfermos que los calculados estadísticamente, evidentemente que hay problemas y que se colapsan las urgencias. Entonces tienes que buscar soluciones determinadas y seguro que hay hospitales que cambian su modelo de urgencias, pero eso no significa que se vaya a desmantelar el sistema sanitario público.
(Nooo... No se va a desmantelar, ¡ya se está desmantelando!)
Traducción: Si los hospitales van mal, es porque la gente se pone enferma.
Así le duelan las tripas, de verdad lo digo y lo deseo. Que le duelan.
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