ARCO 2013


Estos días se celebra en Madrid la feria ARCO (de Arte Contemporáneo). Es un acontecimiento cultural muy sonado, con mucha difusión dentro y fuera de nuestras fronteras. Este año, participan 201 galerías de 27 países, que pondrán a la venta o expondrán obras de más de 2.000 artistas contemporáneos.

La ARCO, no nos engañemos, quiere vender. Han invitado a más de 250 coleccionistas privados y unos 150 profesionales de todo el mundo: miembros de patronatos de adquisiciones, directores de museos, comisarios, etc. Además del típico regateo entre comprador y vendedor, se estrenará un canal de venta por internet, se reunirán un montón de artistas digitales, se publicarán blogs y catálogos electrónicos... Ojalá que vaya todo muy bien.

Un servidor de ustedes, falsamente modesto, ha decidido celebrar el acontecimiento con una performance sobre arte contemporáneo. A través de siete ejemplos, enfrentaré una obra de arte reconocida como tal y expuesta en ARCO para venderse por un montón de dinero con otra cosa que no es una obra de arte ni pretendía serlo y que cuesta, si cuesta, cuatro perras.

¿Cuál de las dos fotografías corresponde con la obra de arte? ¿La de la izquierda o la de la derecha? ¿Por cuál de las dos pagaría miles de euros? Así, siete veces.

Siete preguntas, siete respuestas, y ninguna correcta, porque ya dijo Duschamps que es Arte lo que decimos que es Arte y Gombrich añadió que no existe el Arte, sino los artistas, lo que, a fin de cuentas, nos deja a todos un tanto más confusos que al principio.

Que sea leve.



3 comentarios:

  1. buenos días.
    aquí tampoco estoy totalmente de acuerdo contigo, y lo que me lleva a escribir este comentario, es que gombrich tampoco lo estaría, o quizá lo estaría más de lo que parece (frase confusa, como el arte que comentas). lo que dice gombrich es q lo q valora el arte es el talento. (o eso es lo q interpreto yo de lo q dice gombrich). esa sería la respuesta a tu adivinanza.
    por cierto, gombrich es con el q más coincido en la interpretación del arte, en el capítulo primero d su historia del arte.
    gombrich, a mi parecer es un gran crítico del arte, y una persona con gran sentido común.

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  2. creo que mi comentario ha quedado un poco más confuso de lo q debía.
    lo q yo interpreto d gombrich es q dice q para valorar una obra d arte, hay q valorar si lo q hace requiere talento, no sólo originalidad.
    es muy fácil ser original sin talento. basta con hacer "cualquier cosa" q no haya hecho nadie antes. pero eso no tiene por qué ser arte.
    en mi comentario anterior podía interpretarse que el talento debía estar en quien valoraba la obra, y no en el q la hacía. y no era eso lo q yo quería expresar.
    en la obra citada d gombrich, explica por qué hoy nadie se atreve a criticar las obras "sin talento". los artistas siempre han querido ir contra corriente, y eso incluye tanto al público como a los críticos. pero en la época del impresionismo, los críticos denostaron esa corriente y luego se desdijeron y la aplaudieron. ahora les da miedo caer en el mismo error. hay más en todo esto, claro. el mercado no es ajeno a valorar obras sin talento. pero también había mercado d arte en la época del impresionismo.
    un saludo

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  3. En fin, que nos queda la duda de si tengo talento o soy original, pero la certeza de que, tuviera lo que tuviera, no me como un rosco vendiendo obras de arte. Ay.

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