¿Qué digo yo ahora? ¿Me pongo a reír? ¿Me avergüenzo públicamente? Dicen que la mismísima consellera Tura (que aparece repartiendo café para todos en la película) promovió esta... esto, para elevar la moral del personal (de Justicia).
Tengo la firme convicción de que alguien le da a la bebida, pero ¿quién?
me quiero ir
ResponderEliminarchema
Te quieres ir... ¿a dónde? Ay.
ResponderEliminarYo, yo… No tengo palabras, ¡quiero matar! Me ha dado tanta vergüenza ajena, me ha aguijoneado tanto la úlcera que sólo quiero un Kalashnikov para entrar en el Departament de Justicia y repartir precisamente eso: ¡Justicia Divina!
ResponderEliminarY, por cierto, ¡qué me devuelvan mis impuestos! Tengo suficientes gastos en casa como para tener que pagarles el sueldo del día de autos a toda esta pandilla de imbéciles.
Carlos, Carlos... Calma... Relájate... Cuenta hasta diez. Respira, profundo, uno, dos, uno, dos... Ya dijo el gran sabio que cosas más inteligentes son caras de ver, pero más estúpidas, seguro que se verán... aunque ahora mismo parezca imposible.
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