He leído en un diario que Mataró ha vetado los hoteles del sexo que pretendía abrir el señor Colomer mediante una argucia legal. A decir del periódico, como está pendiente la ordenanza que regulará la ubicación y condiciones de los hoteles del sexo, se retira la autorización hasta que no se aclare este punto. Si no es así, algo parecido. Un tecnicismo. Pero no quería hablar de las piruetas legales, sino de la expresión hotel del sexo.
¡Por el amor de Dios! A veces pecamos de cursis y melindrosos, porque se dice burdel, casa de prostitución, casa de mujeres públicas, casa de lenocinio, casa de putas, lupanar, incluso congal. Palabras hay para dar y repartir. Hotel del sexo me recuerda a Vacaciones en el mar, sólo que no era un hotel, sino un barco de recreo... nunca mejor dicho.
¡Por el amor de Dios! A veces pecamos de cursis y melindrosos, porque se dice burdel, casa de prostitución, casa de mujeres públicas, casa de lenocinio, casa de putas, lupanar, incluso congal. Palabras hay para dar y repartir. Hotel del sexo me recuerda a Vacaciones en el mar, sólo que no era un hotel, sino un barco de recreo... nunca mejor dicho.
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