Fundada en 1798 por Napoleón Bonaparte, entonces todavía general, pero ya presto a ser cónsul, la Academia Científica de Egipto, en El Cairo, es... era... una institución memorable ella misma y su obra. Anexa al Museo Egipcio, albergaba una biblioteca enorme, con doscientos mil volúmenes entre los cuáles se contaban algún raro ejemplar de La Descripción de Egipto o manuscritos de sabios y exploradores.
En una de las últimas manifestaciones en El Cairo, un grupo de personas, provocadores del ejército según unos, fanáticos religiosos según otros, arrojaron botellas de gasolina contra el edificio, que prendió fuego y ha quedado reducido a cenizas. Otros manifestantes, espontáneamente, han intentado salvar lo que han podido, que ha sido poco, no más de treinta mil ejemplares.
¡Qué desastre...!
En fin, lo que digo siempre: empiezas quemando libros y acabas quemando personas.
¡Es un desastre mayúsculo!
ResponderEliminar¿Por qué no enviamos soldados británico, vestidos con el uniforme colonial de Egipto, para poner orden? Además de eficiente sería precioso