Me pido uno


Sale a subasta el coche que conducía James Bond en Goldfinger y Operación Trueno, un Aston Martin DB5. Su propietario, un locutor de radio norteamericano, lo compró en 1969 por 12.000 dólares. RM Auctions anuncia que lo subastará el 27 de octubre con un precio de salida de cinco millones de dólares, chúpate ésa.

El DB5 original era un bólido: un motor de cuatro litros, una potencia de 280 CV, capaz de alcanzar los 230 km/h y de llegar a los 100 km/h en siete segundos y un poquito más. Comparen ustedes: un Escarabajo tenía motores de un litro y 35 CV. Era el coche para James Bond, sin duda (aunque el señor Bond, James Bond, inició su carrera conduciendo un Bentley).

Lleva todos los extras: asientos tapizados en cuero, ametralladoras, escudo antibalas, matrículas intercambiables, radio-cassette, cuchillas ocultas en los tapacubos... El asiento eyectable es un extra aparte, no se incluye en el precio. Pero dicen que está bien: el embrague es nuevo, se le han revisado los frenos y sólo ha hecho 50.000 km. Una ganga.

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