Wings (1927)

Durante años, la dieron por perdida, y eso que había ganado el (primer) Oscar a la mejor película en 1929 (que premió las películas filmadas en 1927 y 1928). Hasta este año, que se ha premiado The Artist, ninguna otra película de cine mudo había ganado el Oscar.

Sí, la dieron por perdida hasta que tropezaron con ella en el archivo de la Cinémathèque Française, en París. Rápidamente, la copiaron en una película de nitrato, para no perderla del todo. En 1997, Wings mereció que la Librería del Congreso de los EE.UU. la seleccionara para su preservación en el United States National Film Registry, por ser, copio, culturalmente, historicamente y estéticamente significativa.

La restauración de la cinta ha sido complicada. Los negativos originales se habían perdido, pero se conservaban unos negativos de recambio en unos archivos de la Paramount, bastante maltratados. Han servido para recomponerla un poco. Una orquesta como Dios manda ha vuelto a grabar la banda sonora original. De los efectos de sonido se ha encargado Skywalker Sound (los de Star Wars), y las escenas en color (que fueron grabadas en su día con el proceso Handschiegl, es decir, pintadas a mano) también han sido restauradas.

Wings dura poco más de dos horas. En su época costó una fortuna (dos millones de dólares), pero fue un éxito de crítica y público. Ah, que no se me olvide, ¡fue la primera película de Gary Cooper!

Fue filmada con aviones de verdad, con aviones de época, y sólo fue (acaso) igualada por Hell’s Angels, la película de Howard Hughes, en 1930, otra que tal.

Por si les interesa, el argumento del bodrio Pearl Harbour (2001) copió descaradamente el argumento de Wings; y el guión de Flyboys (2006) se inspira directamente en el de Hell’s Angels.

La película restaurada se ha editado en formato digital y se ha comenzado a vender este enero pasado en los EE.UU. Pero lo más llamativo es que se ha estrenado en los cines americanos hace pocos días, y ha despertado la admiración del público. No se han atrevido a considerarla una película sólo apta para adultos (aunque tenían ganas, por los desnudos masculinos y femeninos que aparecen en algunas escenas), pero sí que han tenido que clasificarla sólo apta para mayores de 13 años, porque el Hollywood de los años veinte era mucho más moderno que el Hollywood que nos ha tocado en suerte.