¿Saben que lamento? Que la fotografía me haya salido movida, que con las prisas... En fin, malo que es uno. Pero se da muy pocas veces poder fotografiar la pizarra de El Cable sin nadie alrededor, pues El Cable es uno de los locales de más solera, más concurridos de Sitges. Digámoslo de otra manera, si un suburense auténtico dice de ir a tomar unas cervecitas a El Cable, no hace falta decir más, y uno no puede considerarse un verdadero indígena si no entra en El Cable saludando a gritos a izquierda y derecha (el grito de salutación suburense es muy característico).
No hay comentarios:
Publicar un comentario