Com viure Jesús en família



Los habituales de El cuaderno de Luis se sorprenderán por verme prestar atención a un libro con este título. Com viure Jesús en família podría traducirse por Cómo vivir [a, con, en] Jesús en familia. El subtítulo nos ayuda a comprender un poco mejor de qué va el libro. Traduzco: Transmitir hoy la fe y los valores cristianos a nuestros hijos.

El porqué de este apunte se debe a la autora del libro, Sandra Buxaderas, que es periodista y corresponsal en Roma. Lo es para varios medios de comunicación catalanes y cuando le dejan sus múltiples obligaciones profesionales y familiares y sólo si me pongo especialmente pesado, también lo es de El cuaderno de Luis. Sin su inestimable ayuda, por ejemplo, no podría haber cubierto la polémica y dulce discusión de cuál es el mejor helado de Roma, un caso que resta todavía por resolver, ahora que pienso.

No cabe duda de que la señora Buxaderas es una gran periodista, pero es también una gran amiga mía. Esta última razón es más que suficiente para dedicarle unas líneas, y más que le dedicaré si, como espero y esperamos muchos más, la señora Buxaderas nos vuelve a obsequiar más adelante con más libros.

Vayamos al fondo del asunto: el catolicismo ya no es lo que era. Después de años de dictadura nacional-católica, el español medio no quiere saber de la Iglesia más que lo justo y necesario, que es, a juicio de muchos, menos que nada. El número de católicos practicantes se ha hundido y ya no va nadie a misa. Aunque todavía pueden hacer mucho ruido, la influencia de los sacerdotes en el curso de los acontecimientos sociales es residual (véase el consumo de anticonceptivos en familias que se definen a sí mismas como católicas, por ejemplo) y los seminarios están vacíos.

El catolicismo se enfrenta a un número creciente de descreídos, agnósticos, ateos e indiferentes (sobre todo, indiferentes). También contempla con recelo cómo aparecen nuevas religiones en escena y cómo se contestan sus creencias o se discute su credo abiertamente.

En otros países esto forma parte de la costumbre y todos se ríen de todos, pero el católico creyente y practicante hispano ahora ve hostilidad cuando sólo se manifiesta la libertad. Ocurre así porque la educación en los valores cívicos es una asignatura pendiente entre católicos. También entre los no católicos, seamos justos. La verdad es que la educación en los valores cívicos y ciudadanos no ha existido nunca en España y así nos va, a unos y otros.

Ante esta situación, nueva y desconcertante, ¿qué hacen las instituciones eclesiásticas? Eligen a Juan Pablo II, el paradigma de una Iglesia que se siente perseguida y se percibe en retroceso, que se afirma a sí misma no abriéndose, sino oponiéndose a las reformas, manifestándose menos tolerante y buscando ser más populista, que se aferra como una lapa a la tradición más rancia. Sobran los ejemplos.

Lo cierto es que la palabra que planea alrededor de los católicos quizá sea desconcierto. Al menos, en Europa. Segurísimo, en España.

El número de católicos de veras se encuentra en minoría y en esta situación se produce un desasosiego que tiene las consecuencias que he dicho. Mientras crece ese catolicismo carranclón y conservador, que sólo ve que amenazas aquí o allá, crece también el desamparo de un tipo de católico más abierto, que quisiera llamarse heredero del Concilio Vaticano II, pero que se siente huérfano y no ve salida a sus cuitas.

No es un fenómeno exclusivamente católico. Cuando una ideología es la predominante, se relaja y se abre a las influencias de otras ideas. Cuanto más abarca, menos aprieta. Pero si abarca menos, aprieta más y llegado el momento, de tanto apretar puede asfixiar.

En éstas, la intención de cualquier padre es que sus hijos se formen en un determinado tipo de valores, pero ¿cómo? Com viure Jesús en família recoge los cómos de quince familias católicas catalanas que intentan transmitir esos valores cristianos (i.e., católicos) a sus hijos en un entorno que algunos consideran poco favorable, por no decir hostil, que queda feo. Cómo hacerlo sin ahogar a nadie.

Sandra Buxaderas ha entrevistado a estas familias comprometidas con la fe católica. Le han explicado cómo afrontan tantas dificultades y cómo viven el hecho religioso en familia para proteger y comunicar su fe de padres a hijos y viceversa.

Dicho esto, el libro podría leerse como un ensayo antropológico, pero ya les digo yo que no es ésa la intención. El libro tiene que leerse como lo que es, un sumario de ejemplos de fe y práctica religiosa. Será un libro... ¿Cuál sería la palabra correcta? El obispo dijo dijo del libro que era un testimonio de amor cristiano, pero ya sabemos todos cómo hablan los obispos y ya me saldrá el adjetivo, que ahora no me viene.

Está muy bien escrito. No lo he leído todo (todavía). Pero puedo afirmar que se aprecia tanto el orden y la sobriedad de una buena periodista como el intento de dar con la poesía que pueda describir una fe o un sentimiento que viene de muy adentro. Decir mucho con pocas palabras es siempre un mérito. Si echan un vistazo a su blog (http://sandrabuxaderas.blogspot.com.es/) verán por dónde van los tiros.

Mi amistad con la señora Buxaderas me empuja a gritar: ¡Léanlo! ¡Léanlo! Sobre todo, ¡Cómprenlo! ¡Cómprenlo! Pero he de ser honesto y decir que no es un plato a gusto de todos. Si usted comparte la inquietud por la fe de esas familias cristianas, cómprelo, léalo y me lo agradecerá. Si no... En fin, usted verá.

La presentación del libro fue ayer mismo, en la librería Claret, de Barcelona, especializada en libros de religión cristiana (católica). Se sumaron familias, amigos y algunas de las familias entrevistadas por la señora Buxaderas. También se sumó un señor obispo, no crean ustedes, y el acto fue muy bien y muy acorde a lo que se pretendía. Los amigos de Sandra nos alegramos mucho.

Felicitamos a la autora y le deseamos mucha suerte. Esperamos su siguiente publicación con muchas ganas.

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3 comentarios:

  1. Ostres, Luis! Moltes gràcies!

    Només afegiria que els catòlics no som tots un bloc, com em sembla llegir. L'Església som tots... capellans i laics, gent d'esquerra i gent de dreta, silenciosos, tímids i extravertits, autoritaris, liberals, papes i dones, Benet XVI i Francesc, Pere Casaldàliga i Teresa Forcades...

    El que no vol dir que uns no estiguin més a prop d'entendre i practicar el missatge de Jesús que els altres... I els que estan més a prop no han de ser necessàriament els que més surten als mitjans de comunicació.!!!

    El problema és que s'idenfica com a "els catòlics" a un SECTOR de l'Església catòlica, fins i tot només a la seva "jerarquia".

    Jo em puc definir catòlica però per a mi no és essencial, perquè Jesús no va fundar una religió, sinó que va donar un testimoni, un missatge, un camí. Tothom pot estar en aquest camí, vingui d'on vingui i pensi el que pensi. L'important és que s'esforci per estimar, per compartir, per fer costat els més necessitats de la societat. Per això, jo prefereixo definir-me cristiana, o sigui, seguidora del Jesús que sento encara viu, aquí... el Crist, doncs.

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  2. Cara Sandra,

    Si t'ha semblat que deia que els catòlics són o formen tots un bloc, vol dir que no m'he explicat bé.

    Es evidentíssim el què dius: que els catòlics en general s'identifiquen amb un grup de catòlics en particular, però de catòlics hi ha de tota mena i condició. De cristians, també. De bones persones, un munt.

    Aprofito un altre cop per felicitar-te i animar-te a escriure un altre llibre, que tens pasta d'escriptora, caram.

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  3. I jo aprofito un altre cop per donar-te les gràcies pel teu suport! :=)
    Això sí, un altre llibre, si es dóna altra cop l'ocasió, haurà de ser d'aquí a bastant de temps...! Ser mare d'una nena petita i escriptora lliga poc -bé, lliga poc amb qualsevol treball intens o no tan intens, en general! Ser mare és un treball full-time!

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