Alianzas y desencuentros

Lugar de encuentros y desencuentros, pero últimamente un erial de inteligencia.

Las alianzas parlamentarias son mala gente, porque ponen al descubierto muchos intereses ocultos. Pongamos como ejemplo las alianzas parlamentarias de los últimos días en las que han participado políticos catalanes.

En el Parlamento de Cataluña, CiU y PP se pusieron de acuerdo para defender el actual modelo de reforma laboral y rechazaron prohibir el método de fracking para la extracción de metano; en Madrid, votaron a favor del decreto del Gobierno de España sobre las preferentes, que arruinará a miles de familias.

En Barcelona, CiU, PSC y ERC se pusieron de acuerdo para no crear una comisión que investigue el espionaje político en Cataluña (entre catalanes) y votaron a favor de la importancia y el sostenimiento de los medios (de propaganda) públicos de radio y televisión. CiU, ERC y CUP se negaron a permitir que el Gobierno de la Generalidad de Cataluña dijera cuál es el coste de las delegaciones de esta institución en el extranjero.

El señor Ruiz, don Baudilio, respondió a una diputada de IC-V que si quería saber qué recortes había anunciado a los directores de los hospitales públicos catalanes, que los consultara en la prensa (sic). Sistemáticamente, ERC se alía con CiU para no permitir que don Baudilio sea preguntado al respecto por los señores diputados.

También son interesantes los desencuentros. Si ERC no apoya los presupuestos de CiU para la Generalidad de Cataluña, los recortes mínimos que tendrán que hacerse sobre hospitales, escuelas, servicios sociales, justicia, etc., superarán los 4.500 millones de euros. Somos la única Comunidad Autónoma que no tiene presupuesto para 2013. Sólo si se aprueba el presupuesto podrían reducirse esos recortes. El papel de ERC es, cuanto menos, irresponsable y cínico.

Lo mejor es que este año hay que negociar el sistema de financiación de las Comunidades Autónomas. Todavía no existe una propuesta de la Generalidad de Cataluña, que soporta una quiebra técnica y no es capaz de gestionar ni lo más elemental. Pero se ha creado un Consejo de Transición Nacional que nos llevará de la quiebra a la ruina, y se ha creado antes de saber si el pueblo quiere una transición de ésas o ya le estaría bien tener trabajo y una buena red sanitaria y educativa pública sin necesidad de abandonar la Unión Europea. Como dijo un sabio, hace pocos días, antes de la consulta tendrían que hacer limpieza, pero no se aprecian fregonas en el horizonte.

Qué falta nos hace un buen baldeo.