A vueltas con el placer de la lectura

Estos días se habla mucho del informe PISA. Según la tendencia del diario que habla de este asunto, o nos hundimos en la miseria o progresamos lo suficiente. Pero las cifras cantan y aunque hemos mejorado un poquito, el conjunto de España está en la zona mediocre, qué le vamos a hacer. Además, el porcentaje de alumnos excelentes es de tres a diez veces inferior a la media y el porcentaje de repetidores unas seis veces superior a la media. Mejor o igual que otras veces, el asunto no está como para tirar cohetes.

Todos los analistas que he leído se han centrado hasta ahora en el rendimiento escolar, en las competencias de letras, ciencias o matemáticas, pero se han olvidado del placer y disfrute de la lectura, que también analiza este informe tan famoso. Se supone que un chaval asiste a la escuela no para memorizar que Cervantes escribió El Quijote, sino para comenzar a leer lo que ocurrió en un lugar de La Mancha por propia iniciativa, sin que nadie le empuje a ello, el día menos pensado. Esa semilla será el origen de un pensamiento crítico, independiente, razonable y abierto, la de un ciudadano inquieto y culto.

Pero ¿quieren evaluación? Tengan evaluación. Según el informe, los países con más lectores por placer o diversión son los que manifiestan una mejor capacidad de compresión lectora y los que escriben mejor (¡qué descubrimiento!). Y son los mejores lectores los que sacan mejores notas y tienen más competencias de cualquier tipo. En España, la diferencia de rendimiento entre lectores y no lectores es de 98 puntos; en el resto de Europa, de 36.

Un 74% de los alumnos españoles dicen disfrutar poco o nada con la lectura. Según el informe, leen alguna vez al mes alguna revista (o parte de ella) un 51%, algún periódico, un 45%, algún tebeo, un 12% y alguna novela, un 30%. Este relativo amor por la lectura se da aproximadamente por igual en todas las clases sociales, sexos o comunidades estudiadas en España. En la lectura por placer, España está en el último tercio de la tabla, y así no vamos bien.

1 comentario:

  1. Interessant el lligam que fas entre lectura i esperit crític. En teoria, no està garantit -un podria empassar-se la lectura i prou i, de fet, hi ha molts "savis intel·lectuals" sense gaire esperit crític-. Però potser ho afavoreix. Al capdavall, una persona d'esperit lliure pot veure's reafirmada en algunes lectures d'autors dels quals no hauria mai sentit a parlar si no fos perquè és un bon lector.

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