Leonardo de Vinçà (da Vinci)

Los catalanes estamos de enhorabuena. No sólo era catalán Colón, sino que resulta que Leonardo da Vinci ¡también lo era! Es más, a través de un común amigo, un tal Americo Vespuccio, intercambiaban ideas y tal, y se llevaban la mar de bien. De hecho, Leonardo era catalán en el exilio, no catalán catalán, porque su familia, dicen, había tomado las de Villadiego en pleno siglo XIII, perseguida por la Inquisición de aquí, que era malísima. Y dos siglos después, los da Vinci (de hecho, de Vinçà) seguían siendo catalanes, no toscanos, ¡faltaría más! No solamente catalanes, sino de Barcelona, pues eran los Vinçà de toda la vida. Qué casualidad que luego Leonardo naciera en Vinci. Como los italianos son tontos, confundieron Vinci con Vinçà, o viceversa, y la liaron de una vez y para siempre.

Que Leonardo era catalán se demuestra andando, es decir, señalando que no se sabe por dónde estuvo Leonardo entre 1481 y 1483 y que, por lo tanto, como es obvio, estuvo en Cataluña. Más concretamente en Montserrat, porque hay que señalar que la Gioconda no es la Gioconda... ¡sino la Moreneta! ¡La Virgen de Montserrat! ¡Que salta a la vista, hombre, con sólo verla!

¿Quieren pruebas? La capa de mugre acumulada durante siglos que oculta una talla románica con una virgen blanca (caucásica) normal y corriente no es tal, sino un símbolo que relaciona a la diosa Ísis, los cátaros, los alquimistas que poblaban los monasterios de Montserrat y Sant Cugat, los masones y los rosacruces, y seguramente me he dejado a alguno por el camino. Todo eso lo sabía Leonardo, que se regodeaba transmitiendo misterios a golpe de pincel.

Prueba de ello es la simbología oculta en La Virgen de las Rocas, que no son otras, las rocas, que las de Montserrat. ¿Qué es un paisaje toscano? Anda allá, vamos hombre. Porque sepan ustedes que el Santo Grial se esconde en alguna parte de Montserrat y Leonardo, que aprovechó el viaje a Cataluña para estudiar alquimia, lo sabía.

Total, que no hay más que decir. Leonardo era catalán y sanseacabó.

Ésta es la base argumental del ensayo El viaje secreto de Leonardo da Vinci, de José Luis Espejo, que se ha despachado a gusto. Yo, también.

7 comentarios:

  1. Te sobra un acento en "¿Qué es un paisaje toscano?" Por lo demás, soberbio. Un 10.

    ResponderEliminar
  2. Tienes razón. Sobra la tilde en ese "Qué", pero la dejo, para que quede constancia de mis imperfecciones. Gracias por avisar.

    ResponderEliminar
  3. Tu artículo es ridículo y totalmente sesgado. ¿A quién pretendes engañar? No refutas ni un solo argumento de Espejo, y omites los argumentos de peso que Espejo aporta y que no te interesa comentar.

    Por cierto, tanta licenciatura en humanidades y escribes "Anda allá" cuando en realidad intentas decir "Anda yá"?

    A mi me daría vergüenza utilizar estos argumentos y, encima, escribirlos tan mal.

    Un poco de humildad y de espíritu crítico. Venga ya, hombre!

    ResponderEliminar
  4. Sr. Anónimo,

    La expresión "Anda allá" es correcta, como es correcta la expresión "Anda ya", aunque no signifique lo mismo. En cambio, "Venga allá" no es correcta (excepto en muy contadas ocasiones, por el contexto) y ha hecho usted muy bien en escribir "Venga ya". Sin embargo, hay que notar que "Anda ya" no lleva tilde y no se escribe "Anda yá", como usted propone, y que se recomienda abrir la exclamación (¡) para cerrarla después (!), porque cerrarla así, sin precedentes, no es de recibo.

    En cuanto a los "argumentos" del señor Espejo, sólo se me ocurren dos explicaciones: o nos engaña a propósito o se engaña a sí mismo. No sé con cuál de las dos quedarme, pues ambas son igualmente graves. Como obra de ficción, sin embargo, podría resultar entretenida en buenas manos.

    ResponderEliminar
  5. Bueno. Te faltan unas cuantas generaciones. Como el vino. Lo triste que tus nietos te pedirán cuentas por el tiempo perdido. Ellos ya serán catalanes conscientes. La barrica habrá cumplido su cometido. Siempre puede salir un vino defectuoso. Verbi gratia: Boadella, Cañas, Alejo... En general, si la uva es buena acaba dando buen vino porque la tierra es muy fértil y generosa. Pero tu sigue y no desesperes que puede que algún día se haga la luz en tus entendederas.

    ResponderEliminar
  6. Hay gente con muy mala uva, en efecto. ¡Cómo pueden decirse tantas barbaridades y tan seguidas de nuestro amado Leonardo...!

    En cuanto a los caballeros que menciona, no tienen nada que ver con Leonardo, y allá ellos con sus aficiones. Por lo general, no me interesan y no tienen nada que ver conmigo, ni en lo ideológico ni en lo familiar.

    Ah, soy abstemio.

    ResponderEliminar
  7. Hola Luis, encantado de leerte porque eres brillante.

    Mi comentario es de pura preocupación al leer el Anónimo defensor de que Leonardo era catalán, puesto que independientemente de quien tenga razón, No llego a entender la correlación entre creerse esa patraña y ser o no ser un buen catalán. Si opinas como él eres un buen catalán y si no eres un mal catalan. ¿Nos hemos vuelto todos locos o qué?.

    Te voy a poner un caso parecido que vi en un programa de debates en la tele, que estaban discutiendo de los toros: En un momento dado un contertulio afirmó que a ningún catalán le gustaban los toros, y como otro le indicó que a Serrat sí que le gustaban entonces el primero afirmó con rotundidad que era porque su padre era andaluz (es decir, que era un catalán impuro, no era "catalán catalán"...).

    En fin, encantado de leerte.

    ResponderEliminar